La decisión de comprar un inmueble siempre es importante. No debe tomarse a la ligera, y menos si se trata de una nave industrial que afectará al negocio de tu empresa. Encontrar la propiedad que mejor se adecue a tus necesidades tampoco es tarea fácil. Se requiere de un gran conocimiento del mercado para poder elegir la mejor opción para nuestra actividad a corto, mediano y largo plazo.

No solo es una decisión complicada debido a la inversión que supone, sino porque los factores mencionados pueden afectar a la actividad diaria y la gestión de la empresa.

Veamos los factores más importantes a tener en cuenta a la hora de comprar tu nave industrial ya sea para empezar el negocio o trasladarse desde una ubicación previa.

1. Uso de la nave:

Hay que tener muy claro si usaremos la nave para uso industrial o comercial – este último caso es menos frecuente pero ya hemos escrito un blog acerca de todos los usos de naves industriales donde se mencionan algunos casos. También hay que saber de antemano si se trata de un negocio de cara al público, o si esto no será necesario y solo necesitarás un almacén, como es el caso de empresas logísticas o fábricas.

2. Ubicación:

Mejor busca la zona en la que puedas tener todo a mano. Estás cerca de tus proveedores? Estás cerca de tus clientes? Busca localizaciones con carreteras bien pavimentadas para poder enviar y recoger toda tu mercancía de forma rápida y eficaz. Busca la cercanía de puertos, aeropuertos, autopistas… Ten en cuenta la distancia, la accesibilidad, las infraestructuras y el entorno geográfico con las actividades que desempeñarás y no olvides identificar a las empresas ya instaladas en el lugar, los servicios que ofrecen y la competencia.

3. Superficie:

Y no solo nos referimos al tamaño de la nave sino también a los metros construidos y los útiles, la altura, las puertas de acceso, los muelles de carga, las oficinas…
Consejo: no siempre es bueno comprar una nave que se ajuste a las necesidades el momento. Por ejemplo, si compras una nave justa para el volumen de almacenaje actual, es posible que necesites mudarte al poco tiempo. Lo ideal sería elegir una propiedad algo mayor de lo que necesitas, pensando en aumentar el volumen de almacenaje y de trabajo gradualmente, sin que sea excesivamente grande.

4. Acondicionamiento:

Miraremos si tiene los acondicionamientos básicos como el agua, luz o gas. También comprobaremos la potencia contratada para ver si es la que necesitamos para nuestra actividad. ¿Es necesario hacer obras extra para que sea funcional? Así sabremos si se justifica la inversión.
Consejo: Comprar una nave más barata puede suponer altos niveles de inversión en cuanto a acondicionamiento se refiere lo que terminará encareciendo el precio final. Puede resultar más práctico pagar un poco más por un inmueble que cuente con todo lo necesario para tu actividad desde el principio.

5. Normativa:

Es importante conocer las normativas vigentes municipales y urbanísticas que afectarán a la nave dependiendo de la zona y el inmueble para comprobar que la actividad se pueda realizar sin problemas. Recuerde que cada actividad laboral está regida por normativas que pueden requerir instalaciones específicas

Comprar tu nave industrial es un proceso largo y complejo en el que debemos valorar diversos factores. No obstante, esto no significa que el proceso deba ser complicado. Muchas veces los compradores deciden contar con la ayuda de expertos inmobiliarios industriales que se encarguen de buscar lo que más se ajuste a sus necesidades dentro y fuera de su cartera de inmuebles, ayudándolos a elegir y a realizar las negociaciones pertinentes necesarias para el cierre de la operación.

En Factor Industrial le ofrecemos nuestros servicios para asesorarle durante todo el proceso de compra de naves y terrenos industriales. Para más información no dude en contactarnos: (+34) 670 82 41 13.